Sr. Director, hace unos días aparecía en el periódico El País, un artículo de Javier Marías
"La Mujer como lacra". Escritor y miembro de la Real Academia, para más señas.
Permítame sobre este particular que le exprese lo penoso que resulta ver a algunos miembros de la citada Academia fotografiándose entre libros, en actos solemnes o sentados con aire grandilocuente y la mano
estratégicamente colocada sobre el mentón, y total tanta pose para desprestigiar su pretendida imagen de personas sabias o al menos reflexivas y rigurosas, en cuanto la oportunidad lo requiere.
El prestigio de una persona lo da la rigurosidad en cada una de sus exposiciones. De nada sirven las palabras rebuscadas y altisonantes, si lo que se dice no tiene fundamento objetivo y se encuentra vacío de contenido.
Habla Javier Marías en su artículo de las cosas que haría con respecto a un tema si fuera mujer. Y a partir de ahí, comienza una serie de imprecisiones, no
documentadas, odas al
posmachismo y poco más. En primera instancia ya nos introduce en lo que sería, si fuera mujer, con esa serie de redundancia con el elemento compositivo
proto;
protofeministas,
proto Ministra, que el como miembro de la Real Academia debería, en mi opinión evitar. Pero como le iba diciendo
Sr. Director, nos habla de lo que el haría si fuera mujer, ya que las feministas no lo hacen. Aquí Javier Marías se nos presenta más que como el salvador de la imagen de las mujeres y su dignidad, el Mesías que tiene que alumbrar nuestro camino, porque nadie más que él ha sabido ver la verdadera naturaleza de los problemas de las mujeres en la publicidad y los medios de
comunicación. Habría que señalarle al autor de este artículo, que en el año 2007 el 35,6% de las personas que denunciaron en el Observatorio de la imagen de las mujeres del Instituto de la Mujer, eran hombres. De aquí podemos concluir dos cosas que el escritor en cuestión, por su falta de
documentación y porque no era el objetivo de su artículo, ha obviado: la primera que para defender la igualdad entre dos seres humanos, no
necesariamente hay que pertenecer al colectivo oprimido, sólo hace falta un poco de solidaridad y sentimiento de justicia y segundo que existe un organismo creado por el Instituto de la Mujer, al que me refería con anterioridad que ya ha planteado en sus informes un estudio global de la imagen de la mujer en los medios de
comunicación y la publicidad. La rueda de Javier Marías, ya fue inventada hace años.
La conclusión a la que se llega leyendo este artículo es que si él fuera una mujer, que no lo es, o un hombre que cree en la igualdad entre los sexos, que tampoco lo es, no utilizaría un artículo
vacio de contenido y
perfectamente prescindible desde el punto de vista periodístico, simplemente para expresar su rencor de persona
posmachista, para llamar a las mujeres y hombres que reivindican justamente la igualdad y el respeto entre los sexos:
protofeministas, feministas de grito en el cielo o asociaciones
hipersubvencionadas. Quizás si leyera algún informe de la situación de las mujeres en
Andalucía en términos de desigualdad, no hallaría la manera de poder realizar aseveraciones frívolas, como que las asociaciones que trabajan por eliminar la desigualdad están
hipersubvencionadas. Sin duda, si sería
justificable bajo su subjetivo punto de vista, ya que la igualdad para él, no es una cosa necesaria.
En
contraposición a este artículo, me alegro de poder observar un nuevo movimiento de hombres por la igualdad, que no sienten temor de que la mujer tenga una posición de igualdad en todos los sectores, al contrario, tienen la sabiduría suficiente para darse cuenta que el desarrollo de las
pontencialidades de las mujeres son positivas para todas y todos y han encontrado un espacio cómodo en el que ellos también pueden romper con la pesada losa de los
estereotipos machistas y desarrollarse plenamente. A éstos, no les verán en fotografías presuntuosas con la mano en el mentón, ni repartir caramelos envenenados señalando con frivolizaciones a las mujeres lo que tienen que hacer para luchar por la igualdad, a ellos, simplemente les verán luchando por llegar a esa igualdad.
y no viene recogida en el diccionario de la Real Academia!. Chica mala,